Te levantás temprano, te lavás los dientes,la cara, te vestis y desayunas algo rápido.
Mirás el reloj y salís de tu casa. Esperás el tren mientras observás el cielo gris.
Entrás al tren junto a unas cuantas personas más. Unos cuantos empujones y ya estás adentro.
Mientras el tren emprende su camino miras a tu alrededor y ves a cientos de personas con
la misma cara. En ellas observas tristeza, desesperanza, desconformidad. Luego te mirás a vos.
Te ves llevando esa vida tan cotidiana. Repitiendo todos los dias la misma rutina. Levantándote
a la misma hora, lavándote los dientes, vistiéndote, viajando, llendo a trabajar o estudiar,
durmiendo, comiendo, mirando TV. Y te preguntas cual es el sentido de todo esto. Que te
diferencia de ellos. Ves a la gente hacer su vida como automatas. Y quizas sos uno mas de ellos.
Pero hay un facor que rompe con este esquema. Ese elemento químico que hace estallar la mezcla.
Ese número que desequilibra la ecuación. Dios. Dios es revolución en tu vida. Él no te hizo uno
más, te hizo único. No estás por casualidad, estás por una causa. Él tiene un proposito para
vos, tiene misiones para proponerte... y eso si que es emocionante. Ya no podés preguntarte que
sentido tiene tu vida. Tiene mucho sentido. Cada mañana podés sonreir y pensar que es una nueva
oportunidad para cumplir tus objetivos.
Pituso Santi
santi en los hobbies cambia lo de pasar tiempo com tu novia...sino no digas que estas solterito...muy buena actitud la del asiento...espero que si algun dia me cruzas a mi tmb me cedas el asiento....soy dario
ResponderEliminar